En pleno 2025 seguimos hablando de un tema que parece del pasado, pero no: la igualdad salarial todavía no es una realidad. Aunque la ley dice que a trabajo igual corresponde salario igual, la práctica demuestra otra cosa.

📊 En México, las mujeres ganan en promedio 14 % menos que los hombres por realizar el mismo trabajo. Si además se suman factores como edad, origen étnico o discapacidad, la brecha se hace todavía más grande.

Esto no es solo injusto, también es un freno para el futuro. Imagina cuánto talento, creatividad y proyectos se quedan atrás porque no todos tienen acceso a las mismas oportunidades. La desigualdad salarial no afecta solo a las mujeres: afecta al país completo, porque limita el crecimiento económico y social.

Pero, ¿por qué es tan importante hablar de esto?

💡 Porque la igualdad salarial es un derecho humano. Significa reconocer el valor real de las personas, sin importar género, raza o condición.

💡 Porque da seguridad y autonomía económica, lo que permite que más personas puedan tomar decisiones libres sobre su vida.

💡 Porque crea sociedades más justas y competitivas, donde el esfuerzo y el talento pesan más que los prejuicios.

La igualdad salarial no es un tema “de adultos”, ni mucho menos ajeno a la juventud. Es algo que nos toca a todas y todos, porque somos la generación que está entrando al mercado laboral. Y desde hoy podemos exigir que el futuro que estamos construyendo sea realmente equitativo.

La próxima vez que escuches hablar de sueldos o condiciones de trabajo, piensa: ¿vale lo mismo el esfuerzo de todas las personas? Si la respuesta es sí, el salario también debería reflejarlo.